PROYECTO DECADAS

DIARIO WWF


El Little Caesars Arena de Detroit fue el escenario de WWE Hell In a Cell 2017. El evento exclusivo de Smackdown estuvo marcado por los combates dentro de las jaulas y tuvo un broche final muy impactante en el Main Event. A continuación, os ofrecemos las puntuaciones de nuestros colaboradores habituales:



Chad Gable & Shelton Benjamin vs. The Hype Bros (Kick-off match)


Turco:

Combate entretenido en el kickoff que cumple bien su función: por un lado, continuar el ascenso de Gable & Benjamin como equipo, y por el otro, anticipar de modo aún más notorio el cambio de rumbo/ruptura que sufrirán los Hype Bros en las próximas semanas. Me sorprendió ver como Gable & Benjamin llevaron el dominio del combate en detrimento de otro dúo que, en un futuro podría llegar a hacer el turn.

Aun así, que el equipo face llevara la iniciativa sirvió para colocar a Ryder como el “malo de la película” de cara a una posible traición, e hizo lucir a Mojo en el momento donde más saca a relucir sus no muchas cualidades como wrestler: sus enérgicos comebacks. Un par de buenos falsos finales adornaron los instantes finales del match, con el hándicap de tener a la grada apagada en este inicio de PPV.

Teniendo a los Usos como nuevos campeones, el ex American Alpha y el Gold Standard se colocan como probables retadores. Mientras, los Hype Bros han llegado ya seguramente a su punto culminante, y la desunión, o bien turn conjunto, es cuestión de días.


Puntuación: 1/4

Smackdown Tag Team Championships - The New Day (c) vs. The Usos (Hell in a Cell Match)


Mastermind:

Una vez más, ambos equipos dieron un gran combate, siempre aportando cosas nuevas y superando al encuentro anterior. 

En esta ocasión, la celda no desentonó para nada, y es que, si bien la rivalidad no era lo suficientemente personal como para pasar por la estructura infernal, sí la elevaron a ese nivel a lo largo del match. No sólo hubo moves arriesgados y dolorosos, si no que la brutalidad y el sadismo estuvo muy presente. New Day dejó la comedia de lado en todo momento, e incluso cuando tocaba usar trombones y kendos de arcoiris no se sintió como un momento de humor. Pero sin duda fueron los Usos los que llevaron la tortura más allá, con el brutal castigo aun indefenso Xavier Woods.


Big E estuvo fantástico con sus puntuales comebacks y su heroica resistencia ante la desventaja numérica, y todo ello más el perfecto timing de Woods para romper los pinfalls dieron lugar a nearfalls que me tragué por completo. El final es perfecto, y de nuevo se produce un cambio de título que sin embargo no devalúa los cinturones; cuando el hot pottato no perjudica ni a la rivalidad ni a los títulos, es que los wrestlers lo están haciendo, muy muy bien.

Siendo un cóctel de violencia sin piedad, genial teamwork, mucho drama y momentos para el recuerdo, este HIAC pasa a ser de forma inmediata uno de los mejores de la era moderna. Bravo por ambos equipos, que están siendo lo mejor de Smackdown y por mucho.

Puntuación: 1/4

Randy Orton vs. Rusev


Roxas:

Simplemente, soy incapaz de comprar a un Randy Orton face.

La fórmula está completamente agotada, y el combate de ayer fue una prueba de ello. Randy, que estuvo durante varios instantes del combate dominado, volvió a demostrar que es un luchador que se siente mucho más cómodo como heel. Rusev, por su parte, tuvo unos minutos para intentar demostrar que puede ser ese hombre creíble y dominante, pero que se diluyó con el pasar de los minutos para poner over a Randy Orton, a su "DDT Cucarachil" y a su RKO. Ah, y hundir más el Acollade, aquella llave de sumisión que en su día fue mortífera. No hay mucho que añadir ni mucho que analizar porque todos sabíamos que era algo para ocupar sitio en la cartelera. Lo sabían hasta los implicados.

Una vez más, un combate muy poco útil, muy poco eficaz y muy poco válido para PPV que reclaman más espectáculo. Y, por si fuera poco, con resultado innecesario. Rusev no sale del pozo en el que estás desde hace años, y Randy no consigue encontrarse en la posición que parece querer ocupar. Un combate para preparar la comida para el siguiente. 



Puntuación: 3/4

United States Championship - AJ Styles (c) vs. Baron Corbin


Mastermind:

La inclusión sorpresa del Perfect 10 olía claramente a comodín para recibir el pin, pero también aportaba más opciones para que este combate destacase. Y efectivamente, gracias a que fue una Triple Threat pudimos ver secuencias divertidas, spots chulos y acción casi sin frenos... Lo típico, por otra parte. Sí, sale un resultado bueno y muy disfrutable, pero no es nada nuevo dentro de la fórmula de combates multitudinarios de WWE.

Eso sí, es muy agradable ver que les han dejado llevar el combate por su cuenta, sin overbooking de ningún tipo, y cada uno cumplió en su rol. Corbin volvió a lucir como alguien potente a quien tener en cuenta, Dillinger cumplió mostrándose a la altura del reto titular, y Styles, por fin alejado de las historias terribles con Shane y Owens y de las tentaciones spotty de Cena, pudo volver a brillar por sí mismo como tanto he echado de menos en este 2017.

Otra cosa que me encanta es el resultado; Corbin no se merecía el entierro que estaba sufriendo y me alegra ver que vuelven a darle una oportunidad. El USA Championship era el paso necesario en su desarrollo como estrella a largo plazo,y con Dillinger cada vez más asentado en el roster y Styles libre para volver al main event, voy a ser optimista y a pensar que de este combate pueden salir cosas bastante positivas para la programación de Smackdown.


Puntuación: ⭐⭐3/4

Smackdown Women's Championship - Natalya (c) vs. Charlotte Flair


Jaime:

Esperaba más. Teniendo en cuenta la recordada batalla que mantuvieron ambas en NXT por el año 2014, los duelos en el main roster entre Charlotte y Natalya se están quedando lejos de las expectativas. De este nuevo combate únicamente destaco el buen papel de la retadora en cuanto al selling de su pierna.

Con Natalya volvió a pasar una vez más lo de siempre. Es una wrestler correcta a nivel in-ring pero que, con el paso de los años y la llegada del nuevo talento femenino, ha dejado de destacar. Si a esto se le añade su incapcidad de conectar con el público, algo acentuado aún más como heel, el pésimo resultado no sorprende a nadie.

Lo único bueno que puedo sacar de esta pelea es el final. La campeona salva un PPV más su título, pero su reinado parece estar bastante cerca de concluir. Espero que en Survivor Series se produzca el tan necesitado cambio de campeona. Llegó la hora de que la empresa apueste por la calidad en una división de Smackdown que lo necesita con urgencia.


Puntuación: ⭐⭐

WWE Championship - Jinder Mahal (c) vs. Shinsuke Nakamura


Turco:

La rivalidad floja y los precedentes poco convincentes invitaban a esperar poco respecto a lo que pudiera deparar este combate. Una vez más, lejos quedó de ser un match a la altura, de ser un encuentro digno de lo que requiere el campeonato máximo de una marca, y no solo por la sosa trama de la que fuimos presente en Smackdown las últimas semanas, sino porque la performance de ambos dejó que desear. Si, fue mejor que lo he visto en Summerslam, pero eso es de lo poco positivo que se puede sacar.

Los compases iniciales poco interesantes dieron paso a una fase de dominio de Mahal que se inició con algo tan simple como un poco contundente golpe a Nakamura contra la barrera. Si bien Jinder fue capaz de cortar algún pequeño comeback del japonés mientras le tenía sometido, el limbwork del campeón sobre el brazo del aspirante fue algo que no se aprovechó prácticamente nada en el tramo posterior, siendo simple y soso relleno. Hasta aquí, nada que no podamos ver en cualquier semanal... aunque la cosa mejoró llegado el climax. Fue la mejor parte, y se supo dar juego con las intervenciones de los hermanos Singh, tanteando con todas aquellas victorias que estos tipos regalaron a Mahal, logrando un gran heat al momento de que el árbitro los expulsara de ringside para clamor del público (bastante apagado el resto del combate). The Modern Day Maharaja ha sobrevivido con un poco de fortuna y sin sus ayudantes a su mayor reto como campeón, e imagino que eso es lo que buscaba plasmar, pese a que la figura del indio como paper champion siga siendo evidente.

¿Ahora qué? Llegados este punto, el cambio de título debe llegar en el contexto de un gran escenario, anticipando el fin de reinado como algo grande, y poniendo en un lugar privilegiado al tipo que destrone a Mahal. Pero todo esto sigue sin compensar que llevemos 5 meses con un campeón que no alcanza a dar combates a la altura cuando las situaciones lo requieren, que a duras penas cumple como entertainer, y, además, participa en tramas tan insustanciales y cómicas como esta. Párrafo aparte merece Nakamura, que pese a bailar con alguien no muy diestro, sigue cada vez más lejos de ese referente al que prometía parecerse una vez fue fichado por WWE. Save Us AJ. Y por favor, que esto no dure hasta Wrestlemania.

 

Puntuación: 1/2

Bobby Roode vs. Dolph Ziggler


Iago:

Insufrible encuentro el disputado entre el debutante Bobby Roode, que escuchó sus primeros cánticos de “This is boring”, y el “renovado” Dolph Ziggler, con un gimmick que desprecia las lentejuelas para centrarse únicamente en el trabajo sobre el ring y que paradójicamente se marcó una de las peores actuaciones que le recuerdo.

La verdad es que era difícil esperar algo de este combate. La motivación que se suponía en un Dolph que estrenaba actitud brilló por su ausencia, y la que podía tener Roode en su debut en PPV se diluyó entre un desempeño en el ring totalmente mediocre y su nada acertado trabajo como face. A todo esto hay que añadirle que no se ha puesto nada de esfuerzo en alimentar esta rivalidad, ni siquiera en desarrollar mínimamente alguno de los dos personajes (que recordemos son nuevos para el público).

Sí, los antecedentes no presagiaban nada bueno (salvo para algún jarcor fanboy que vería en Ziggler alguien desaprovechado y en Roode una autentica superstar, JA), pero el señor Dolph Ziggler es capaz de ingeniárselas para que un combate sin expectativas sea una tremenda decepción. Porque no sólo fallo en cuestión de estructura, selling o storytelling; además tuvo varios movimientos técnicamente malos, impropios de gente con 15 años de experiencia. Debería estar prohibido por la UNESCO. Y aún con todo, no es un DUD.


Puntuación: 1/2

Shane McMahon vs Kevin Owens (Hell in a Cell Falls Count Anywhere Match)


Jaime:

Otorgarle una duración de 40 minutos a un combate tan "limitado" por la estipulación quizás sea excesivo. Sin embargo, creo que en esta ocasión supieron llevarlo de manera correcta sin que este hecho fuese una gran losa para la lucha.

Estamos ante sin duda el escenario en el que mejor se maneja Shane McMahon. Y un nuevo ejemplo en su carrera de que, aunque no te guste su estilo, hay que admirar su valentía y su entrega por dar el mejor espectáculo posible. Un tipo que no duda ni un segundo en poner su cuerpo en juego para levantar del asiento a los aficionados merece todo el crédito del mundo.

Me pareció brillante la forma de utilizar la jaula para aumentar la intensidad y la violencia del combate. Spots como el de Kevin Owens aplicando una pop-up powerbomb en lo alto del pabellón al hijo de los McMahon me dejaron muy buenas sensaciones durante el mismo. Al fin y al cabo, esto es lo que pido a un duelo con esta estipulación.


El desenlace estuvo a la altura de su desarrollo. La aparición de Sami Zayn ayudando a Owens es el turn heel más inesperado que recuerdo en los últimos tiempos. Quedó como un final tremendamente sorprendente y espectacular que deja con ganas de saber más sobre esta nueva historia a los fanáticos.

Veremos si con esta decisión la empresa consigue otorgar importancia a un luchador que la necesitaba de manera urgente para reengancharse al uppercard de la marca azul. A priori, no me desagradaría ver un nuevo litigio entre los canadienses en 2018. WWE, varios meses después, vuelves a tener mi atención. No la desaproveches.

Puntuación: ⭐⭐3/4


Turco:

Se pueden enumerar con los dedos de una mano las ocasiones en las que una rivalidad mereció tener cabida dentro de la celda infernal con este evento temático, y por suerte, ayer fuimos testigos de una, con el importante hándicap de que uno de los participantes no era un wrestler en activo. Aún con ello, difícilmente pudieron ofrecer de manera conjunta un match mejor. Todo el rencor, el odio y la sed de venganza se cristalizo de modo notable entre ambos, y eso es lo que realmente debemos valorar.

Un combate tan largo es fácil dividirlo por fases, siendo la primera en la que Kevin Owens lleva la iniciativa, lo lógico al tratarse del heel, y del luchador más experimentado. Genial trash talking por su parte, con un par de detalles que son los que realmente aderezan combates tan personales (como el saludo de a los hijos de Shane). La cannonball de Owens que Shane esquiva da paso a unos compases donde relucieron los spots. Es lógico que un combate con Shane presente no sea un alarde técnico, y, de hecho, lo preferible aquí era establecer el climax de la acción en base secuencias premeditadas, pues el aborrecimiento entre los dos contrincantes era el verdadero atractivo del encuentro, y el mejor modo de plasmarlo era en base a big moves contundentes.

Los compases en la cima de la estructura son quizás lo mejor del combate. No dejando ser moves simples ejecutados a 6 metros del suelo, pero la tensión constante que se siente al estar ambos a tan gran altura, el impacto que conlleva caer en el acero, y la idea de proximidad de ambos a los bordes de la estructura, crearon una atmósfera genial en estos minutos. ¿Tiene sentido haber salido de la estructura cuando la idea del combate es permanecer encerrado? No le veo la lógica al hecho de que Shane buscase salir a propósito (con KO sería más razonable), y no me convence por mucho que el ex comisionado tuviese ganas de tirarse desde matarse lanzándose desde algún lugar alto. Pero aquí Shane O'Mac lució como lo que debería ser: un hombre que tira más de corazón que de cabeza, que abusa de un rápido y fugaz striking más que de llaves complejas, y que se maneja más por impulsos que por lo que le dice la razón. Fue un tipo corriente luchando por su familia, y puso su vida en juego por ello.

Owens había despreciado a su rival de todas las maneras posibles, cuando al final fue él quien no tuvo las agallas de saltar desde la celda, cosa que el propio Shane hizo al final del match. Creo que esa relación entre instantes es lo mejor de todo el combate, un match que, pese a su duración, creo que no le sobra nada, y cuyo storytelling y spots compensan la ausencia de skills de uno de sus participantes. La inclusión de Sami Zayn augura buenos planes para él en el futuro; su intervención discreta concuerda con su personalidad y con un posible turn a favor de su gran rival. Veamos como lo manejan.

Contaron la historia que querían. Era lo que se les pedía, era lo que ofrecieron, y por ello tiene calidad. Muy buen combate.



Puntuación: ⭐⭐1/2


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Las fotos empleadas pertenecen a la galería fotográfica del evento en WWE.com, la cual podéis encontrar pulsando aquí.

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