Pues aquí estamos, cumpliendo. Sinceramente, me sorprende ver que hemos sobrevivido siete días
- Jim Breaks vs Jon Cortez - Joint Promotions, 2/2
MASTERMIND:
Es duro ver un combate de Jim Breaks, un tío que hace poco mató a golpes a su ex mujer, pero había que tratar de ser objetivos. Y este es un gran, gran combate.
Si en Saint vs Grey teníamos un duelo amistoso y lleno de respeto entre dos favoritos del público, aquí es todo lo contrario: Breaks, el European Lightweight Champion, es bastante odiado, y Jon Cortez el claro favorito de los fans. Con estos dos personajes y un público tan vivo, podemos ver una tremendísima performance heel del campeón: desde golpes a traición a modo de provocaciones, trashtalking y agarrar del pelo o mallas de Cortez para ganar ventaja y ser abucheado, hasta sus fantásticos chillidos y quejidos que deleitan al público, todo lo que Breaks hace consigue exactamente la reacción que quería conseguir. Jon es muy buen complemento suyo, porque logra zafarse de sus llaves y probar que es mejor técnico que el campeón, humillándole en varias ocasiones. Breaks no tiene reparo a la hora de ponerse en ridículo para poner over al rival, y eso se agradece mucho.
Técnicamente hablando, no es tan espectacular como Saint vs Grey, aunque Cortez sigue aportando esa magia a la hora de llavear que hace único el estilo de Joint Promotions, pero en lo que de verdad destaca este match en sí es en su variedad: mientras Saint vs Grey es una exhibición de llaveo y atletismo, aquí vemos momentos de exhibición de Cortez (quien inteligentemente no abusa de ellos), de striking, de trampas, de buen armwork de Breaks (que es bien vendido por Jon), de emoción rumbo al final, de polémica post-match... ¡Hasta el selling y las quejas de Breaks tienen algo de comedy wrestling! Un combate muy completo, y con cada uno de esos elementos bien insertados, sin sentirse como un popurrí desordenado que meta de todo porque sí. Puntuación: ★★★★ 1/2
SONNY:
No recordaba lo bueno que era Jim Breaks comportándose como un matón con sus rivales. Lo había visto antes con Steve Grey y ahora tocaba verlo con Cortez, un desconocido para mí antes de verlo por primera vez acá. Cortez es también uno de los mejores ligeros de la época así que iba a suponer una competencia dura para Breaks. Y es así como plantean el combate, con Breaks tratando de amedrentar desde un principio a Cortez empujándolo y llevándolo a llaves sumamente dolorosas, las cuales no salen suponer un problema para Cortez en un inicio. Breaks se va poniendo cada vez más intenso y se va centrando en una parte en específico de Cortez, su muñeca, a la cual castiga con tal fortaleza que da la sensación de estar partiéndosela ahí mismo.
Así van pasando los rounds hasta que llega lo que creo que es la mejor parte, cuando ambos deciden olvidarse de la ‘esencia’ del estilo y comienzan a llavear la pelea a un tono más físicos motivados ambos por la constante tensión que hay entre ambos y que hace que lleven esto a un tono más personal. Breaks nunca baja la intensidad del combate, es más se pone más enérgico con sus castigos, logrando rendir a Cortez con una llave a su dañada muñeca para llevarse el sexto round. Esto trata de repetirlo pero Cortez, hábilmente, logra someterlo con la cuenta de round para quedarse empatar. El final puede ser un poco extraño para algunos y hasta insatisfactorio pero me parece el adecuado. Creo que ningún otro hubiese capturado tanto la personalidad de ambos como el que tuvimos esta vez. Sin más conclusiones que sacar, debo decir que este combates es mi favorito de lo que va de la lista. Puntuación: ★★★★ 3/4
- Jerry Lawler vs Terry Funk - CWA, 23/3
MASTERMIND:
¿Sabíais que sin este combate jamás existiría la puntuación de cinco estrellas? Jim Cornette, el inventor del sistema, puntuaba sobre un máximo de cuatro hasta que este combate le hizo romperlo. Vamos, que fue para él lo que para Meltzer fue el primer Okada vs Omega.
Un poco de contexto. Tras haberse recuperado milagrosamente de una lesión en la pierna, Jerry Lawler volvía, algo que no le gustaba al jefazo, Jimmy Hart, quien ya estaba pensando en sustituirle. Fue ni más ni menos Terry Funk quién llegó a Memphis para cobrar el precio de la cabeza de The King. Esto es un No DQ match, porque el objetivo era claro para la dupla Hart & Funk: acabar con la carrera de Jerry.
Y pfff, es una locura. Terry es el maestro supremo a la hora de bumpear como un loco y hacer overselling, y quizás en otra situación me molestaría tanta exageración, pero el ambiente del público del Mid-South Coliseum es contagioso, y es que se desviven por ver a Lawler darle una paliza a Funk. No pude evitar sentir lo mismo; de hecho, todo lo que sucede me sigue divirtiendo como pocas veces viendo wrestling, ¡y es un match que ya he visto cuatro veces! Es imposible no pasárselo en grande viendo a Funk vendiendo como si fuese Dolph Ziggler tras tomar éxtasis, a ambos lanzando sus perfectísimos puñetazos, a Terry disfrutando como un maníaco del sabor de la sangre de Lawler, a éste llevando a cabo un fenomenal comeback con el público explotando de emoción... Y Lance Russell, el comentarista, señalando que 'la pelea se ha salido de control en apenas siete minutos' es glorioso.
Creo que lo más mágico de este combate es que en todo momento se siente que es una batalla en la que Lawler se está jugando su carrera. No es parte de la estipulación, pero por la storyline se sabe perfectamente que Funk no ganará si no es habiendo destrozado a The King para siempre, y se refleja en todo momento de esta violenta tormenta que es el combate; el peligro y la desesperación siempre están ahí. El drama llega a su nivel más alto cuando Terry usa una silla para joderle la pierna a Lawler (¿¡recordáis de qué lesión había logrado volver Jerry a duras penas!?), para rematarlo con el Spinning Toe Hold... salvo que es el jodido Jerry Lawler, y nadie le va a usurpar el trono si puede evitarlo, por lo que logra revertir la situación, silla en mano, para conseguir ganar a duras penas: por count out.
Sí, el final es decepcionante, pero sirve para reflejar que Lawler ha estado tan en peligro que ni siquiera ha podido lograr una victoria decisiva. Eso y que a veces Funk se pasaba con el overselling (demasiado incluso para él xD) le impiden ser parte de la élite de matches, pero todo lo demás: los puñetazos, la sangre, el público, la historia, la locura de Terry, el comeback de Lawler, el clímax; todo eso es sobresaliente y da lugar a una de las peleas más alocadas, divertidas y emocionantes que vayamos a recoger en este proyecto. Puntuación: ★★★★ 3/4
SONNY:
Y llegamos a la rivalidad Funk-Lawler y que mejor comienzo que este combate, un brawl salvaje y lleno de sangre. Acá vamos a ver reflejado el odio que se tenían ambos desde un inicio cuando Lawler sale a matar a Funk que queriéndole hacer honor a la estipulación sale a buscar un objeto externo para castigar a Jerry. Las secciones de domino de Terry son geniales, golpea y conecta de una manera única mostrando en cada puño esa animadversión que siente por Lawler; estas van bien complementadas con los comebacks de Lawler que suelen estar siempre en el momento preciso encendiendo al público todo lo posible haciendo que se siente un ambiente tremendo.
El momento cumbre llega cuando Funk se da cuenta que no iba a ser suficiente atacar como un lunático la frente de Lawler y se ensaña con su buscar pierna. El final llega después de un comeback de Lawler que decide darle de su propia medicina a Funk castigando también su pierna. Todo ha sido tan perfecto pero eché en falta un poco más de dramatismo en el clímax por parte de Lawler, una cojera o unos gestos de dolor hubiesen aportado mucho más para terminar este momento épico. Igual no deja de ser por lejos uno de los mejore combates de ese año. Puntuación: ★★★★ 3/4
- Terry Funk vs Jerry Lawler - CWA, 6/4
MASTERMIND:
Desgraciadamente, lo de "segundas partes nunca fueron buenas" es cierto aquí.
Este es el famoso primer Empty Arena match, que surge cuando Funk reta a Lawler para terminar el trabajo sucio que no pudo zanjar en su combate en marzo. La idea era que no habría más que un cámara, un fotógrafo, el comentarista y ellos dos; sin árbitro, sin reglas, simplemente pegarse hasta que uno no quisiera o pudiera seguir. No suena taaaan mal en papel, supongo...
Francamente, lo mejor es el segmento entre Terry y Lance Russell antes de empezar. El combate no será nada del otro mundo, pero es uno de los mejores ejemplos del tremendo personaje que ha sido Terry Funk en el pro wrestling: impulsivo, desquiciado, impredecible, caótico. Es divertido verle perder los nervios esperando a que Lawler aparezca, y más aún verle meterle una paliza mientras grita y se ríe como un poseso. Pero al margen del show de Funk, no hay mucho más. La mayor parte de la pelea se la pasan caminando sin tocarse, el brawl en ringside es flojito hasta que Terry toma el control, y el comeback de Lawler, tan legendario en su anterior encuentro, es aquí uno de los peores de la historia. La tensión en torno al ¿trozo de cristal? (en serio, ¿qué cojones es eso? xD) con el que ambos quieren sacarse un ojo está muy bien, eso sí, pero en general estamos ante un combate muy, muy raro... y no en el buen sentido. Aprueba por los pocos momentos brillantes que hay a veces. Puntuación: ★★ 1/2
SONNY:
Continuando con la rivalidad entre ambos caemos ante su choque más famoso, el Empty Arena. Después de una interesante promos de Funk aparece Lawler para encararlo y comenzar a golpearse. Otra vez nos encontramos ante un brawl pero la diferencia es que acá tienen todo el coliseo a su antojo y así lo demuestran golpeándose con todo lo que tengan al alcance, sillas, mesas, todo.
Me encanta como usan todo ese odio contenido que tienen para darle forma al combate. Cada golpe parece un ajuste de cuentas entre ambos y no bajan la intensidad en ningún momento. El final me parece igual de memorable que el combate, Terry va a cortar a Lawler con un objeto punzo cortante pero nuevamente como en su anterior combate Lawler demuestra estar a un paso delante de él y logra anticiparlo clavándoselo en el ojo. El final es digno de una película de terror, con Funk casi llorando por el inmenso dolor que significaba tal ataque. Puntuación: ★★★★ 1/2
- Jerry Lawler vs Crusher Blackwell - CWA, 4/5
MASTERMIND:
Me encanta este combate. Es un gran David vs Goliath, solo que Goliath no es sólo fuerza bruta. Blackwell sorprende nada más sonar la campana a Lawler ¡con una genial dropkick! Ni the King, ni yo ni nadie lo vio venir; lo adoro. Blackwell destroza a Jerry con una ofensiva aplastante, figurada y literalmente; luce muy bien como monster heel y Lawler vende para él de fábula. Jerry tiene breves pero chulos momentos en los que consigue sobreponerse, como cuando lo derriba a golpes por primera vez o cuando le devuelve a la mole el back suplex... pero no sirven de mucho. Ni siquiera cuando lo ametralla con sus perfectos puñetazos (gran imagen verle desesperado, arrodillado ante él, lanzándole golpes rápidos a la cabeza), Blackwell deja de retomar el control. Me encanta cuando Jerry está llevando a cabo su combo de directos, y Blackwell simplemente se cansa y le lanza un gancho tan brutal que tumba al héroe de Memphis por varios segundos.
Y es que algo muy curioso aquí es que Lawler se ve forzado a tener dos comebacks, dado que Blackwell constantemente se impone. Y es curioso no sólo desde el punto de vista del storytelling, si no a la hora de compararlos: el primero es fantástico, se nota que está sufriendo una paliza pero aún así intenta contraatacar; pero el segundo es más 'hoganesco', haciendo un no sell repentino a la ofensiva del rival. Aunque lo mejor es verle despertar al público con simplemente una mirada, eso es alucinante. Vaya face.
Blackwell luce como una bestia casi imparable, pero conforme crece su confianza aumenta la profundidad de su propia tumba. Lawler debe recurrir al oportunismo para ganar, y aunque el final es bastante malo en ejecución, la idea que transmite es muy acorde con la historia de este pequeño gran match. Muy pero que muy disfrutable. Puntuación: ★★★★
SONNY:
Otro combate más de Lawler, el ace de Memphis. Blackwell, por su parte, es un wrestler genial que sabe manejarse estupendo a pesar de su peso, usándolo como una ventaja más que como una desventaja: ni bien inicia el match, Blackwell madruga a Lawler con unas dropkicks, un ataque poco usual para alguien de su tamaño por ende logra sorprender a Lawler para hacerse con el control de prácticamente toda la lucha. Sus secuencias de dominio son geniales, no es para nada rutinario y como dije logra usar su peso para darle frescura a su ofensiva. Por su parte Lawler tiene uno de los mejores comebacks de todos siempre sabe en qué momento colocarlo y que hacer para que luzca verdaderamente bien.
El final es algo simple y hubiera agradecido quizás un poco más de build up pero es una gran carta de presentación para Blackwell y una confirmación más de que Lawler es el MVP de 1981. Puntuación: ★★★★ 1/4
- AWA World Heavyweight Championship: Verne Gagne (c) vs Nick Bockwinkel - AWA, 10/5
MASTERMIND:
Este es el combate de retiro de Verne Gagne, frente a su enemigo y sucesor como ace de AWA, nuestro Nick Bockwinkel. La historia aquí es si Gagne podría lograr retirarse como campeón mundial, algo jamás visto (sí, Verne era un tío con bastante amor propio).
Lo primero que se me viene a la mente para calificar al combate es "altibajos". Tiene buenos momentos, como Bock cansándose de ser superado en la lona y yendo a atacar la pierna de Gagne con toda la maldad del mundo, el legwork de Verne en respuesta, o el emocionante último par de minutos, pero también malos, como que ninguno vendiese algo del castigo a la pierna, un ref bump que no sirvió para nada o el lamentable resultado.
Necesito hablar con spoilers aquí, y es que Gagne GANA el combate. Se retira como campeón. Eso ya de por sí es... feo, pero peor aún es que humilla totalmente a Bockwinkel. Se muestra superior a ras de lona, no vende lo suficientemente bien para dejarle over, y el terrible ref bump sólo provoca que Gagne tenga vencido a Bock pero no pueda ganar porque no hay árbitro... pero luego sí gana. Estoy totalmente en contra de bookear una victoria moral del face si aún así luego va a a ganar igualmente: Gagne ha derrotado dos veces a Bockwinkel aquí. Es un bookeo terrible que perjudica bastante al combate. Combate que, por otra parte, tiene un buen despliegue técnico por parte de ambos y unos geniales bumps de Bock. La emoción final en torno a las Sleepers y el brutal Back Suplex también le suman, pero es una lástima que por el ego de Gagne un combate tan importante y con tanto potencial no haya podido ser algo más que "bueno a secas". Puntuación: ★★★ 1/2
SONNY:
Buah, este match es una mezcla de sensaciones. Por un lado me encanta ver un veterano como Gagne a tan alto nivel en esa época pero por el otro me fastidia por sobremanera su constante manía por ser la persona más importante aún en su retiro. Voy a empezar contándoles el resultado pero es fastidioso que después de toda la transición y la construcción que hubo durante el combate gane Gagne. Está bien que el tipo sea bueno, eso nos lo cuentan durante el match pero es imposible que alguien de esa edad sea tan superior a alguien como Nick que es prácticamente la estrella de la AWA.
Aun así con todo este problema el combate me parece una pasada, es imposible cansarse del buen matwork de Bockwinkel, es un maestro a ras de lona. Su técnica es impresionante y siempre lo complementa con pequeños detalles como atacar la extremidad de un rival cuando se ve superado. Gagne está a la altura también y demuestra que aún estaba vigente para esa época, pero no lo necesario para vencer a la estrella de una forma tan fácil. En fin, ventajas de ser la máxima cabeza de una promoción. Puntuación: ★★★★
- Buddy Rose vs Matt Borne - PNW, 6/6 (parte 2 , parte 3)
MASTERMIND:
Tenía este combate entre mis MOTYCs, y desgraciadamente se ha caído de ahí, pero vaya si sigue siendo un muy buen match. En 1980 ya resaltamos lo gran heel que es Buddy Rose, esa mezcla entre ridículo y peligro, y su habilidad para ser el mejor bumper de todos los tiempos. Aquí, vemos otro motivo -muy gordo- por el que considerarlo entre los mejores wrestlers de la historia: su capacidad para sacar lo mejor de rivales totalmente por debajo de su nivel.
Matt Borne (el futuro Doink the Clown original en WWF), si bien tiene al público de su parte y una ofensiva vistosa, no es que sepa vender a largo plazo, su timing a la hora de realizar comebacks no es precisamente el mejor, y no es técnicamente tan capaz como el Playboy, pero este termina siendo un combate bastante bueno porque este último sabe como sacar lo máximo de él: vende y bumpea de lujo para Borne, abandona la estrategia del armwork en cuanto ve que Matt no lo va a saber vender lo suficientemente bien, y sus secciones de dominio en el castigo a la espalda crean mucha empatía por el face. Pocas cosas mejores en este mundillo que Buddy Rose atacando una zona específica del cuerpo.
El combate no tiene mucho más, clásico 2 out of 3 Falls de PNW con final polémico. Quizás esto no sea de lo mejor de la carrera de Rose, pero es de los mejores ejemplos de cómo es capaz de transformar algo simplemente entretenido en el papel, en algo bastante interesante y bueno. Puntuación: ★★★ 3/4
SONNY:
Buddy Rose me parece el perfecto ejemplo de un wrestler versátil. Es capaz de ponerse en cada situación posible y sacarla adelante. Esta vez le toca estar al frente del combate llevando las riendas de la lucha y vaya que lo hace de maravilla. Borne no es malo pero está lejos de estar a la altura de los grandes nombres de Portland, cumple pero puede ser mucho mejor sin duda. Acá se presenta la dinámica clásica de los combates de Portland con el heel dominando al face hasta que este hace su comeback y vamos al desenlace del combate con un final generalmente polémico. La diferencia es que Borne no es tan bueno como Martel ni como Piper, por citar dos ejemplos recientes en la lista. Borne no tiene la capacidad de identificar en que momento realizar su recuperación o no tiene un selling que te venda que de verdad está en problemas... Y aun así, Buddy Rose es excelente y sabe cómo llevar esto adelante, haciendo lucir bien a Borne, vendiendo todo lo que éste le da y dejándolo over para el final polémico.
Lo dicho, si en lugar de Borne hubiéramos tenido a alguien tan bueno como Rose seria otro combate de esos casi perfectos que abundan en la carrera del Playboy. Puntuación: ★★★ 3/4
- Jon Cortez vs Steve Grey - Joint Promotions, 27/7
MASTERMIND:
Si estáis siguiendo el proyecto, ya conocéis a Cortez y a Grey, dos muy buenos faces que respetan las leyes y poseen honor. Uno se esperaría que de un encuentro entre ambos se viese una deportividad y respeto mutuo admirables... Pero va a ser que no. Y no era para menos, porque lo que se jugaban era aspirar al World Lightweight Championship de Johnny Saint.
Pero vistámonos por los pies. Cortez está muy concentrado y es quien domina durante la mayor parte del match, permitiéndose además algunos detalles feos, como ensañarse con la oreja de Grey o no hacer un clean break del todo. Jon piensa que su rival es demasiado honorable como para seguirle el juego, y así es durante las primeras rondas, pero finalmente Stevie se ve contra la espada y la pared y se produce el gran punto de inflexión: un pedazo de forearm para romper la llave al brazo que le habría hecho rendirse. Cortez, por supuesto, se lo toma fatal, pero el público está con Grey, y la expresión de descontento de este es genial: él no quería salirse del llaveo, de una contienda justa, pero Cortez no le había dejado opción. Y ya que el daño estaba hecho, Grey tira la casa por la ventana y lanza más strikes a partir de entonces, ante un Cortez cuyo cabreo aumenta ronda tras ronda.
Y es que lo interesante es observar como este combate, de un encuentro honorable, pasa a ser un pique que se les fue de las manos a los dos; sus careos tras cada fin de ronda son más tensos, ya apenas hay clean breaks, incluso rozan la ilegalidad a veces. A través de sus expresiones faciales y de las osadías que se permiten, ambos plasman que se están hartando del otro y que no hay lugar para el honor aquí. Ambos personajes se van desarrollando y me encanta ver eso en un match. Cortez, tan buen babyface ante Jim Breaks, es aquí un face arrogante muy convincente, mientras que Stevie está genial trabajando como underdog, pero en un rol de 'no quiero romper mi código pero si tengo que hacerlo, voy a hacerlo'. Es una historia compleja, con un ambiente cada vez más tenso y un final trágico, aunque técnicamente no es demasiado espectacular. Pero, desde luego, es un combate muy inteligente, bien planteado y ejecutado. Puntuación: ★★★★ 1/4
SONNY:
Ahhhh mas WOS. Esta vez tenemos a dos de los babyfaces mas notorios de la época, Jon Cortez y Steve Grey, en un combate que me parece el ejemplo perfecto de deportividad pendiendo de un hilo. Ambos son muy buenos en lo que hacen, pero Cortez busca demostrar que el es mejor sin duda alguna tomando el control la mayor parte del combate algo que por supuesto que no es muy del agrado de Grey que busca de alguna forma u otra ponerse a la par.
El combate llega un punto donde sucede lo impensado, ambos se salen de la esencia del estilo y comienzan a lanzarse strikes como si nada, esto seria comprensible en un combate de Jim Breaks que es un heel con una personalidad muy marcada y que es capaz de llevar al limite a cualquiera pero sorprende que pase acá con dos babyfaces que suelen respetar mucho el 'juego bonito'. Lo bueno es que venden bien esa historia de como se pueden sacar de quicio ambos solo con buscarse superarse, es algo que trabajan a la perfección y le de un plus muy especial al combate que de por si con lo bueno que es el estilo y con lo bueno que son los performers que tratan de escenificarlo se vende solo. Puntuación: ★★★★
- NWA World Heavyweight Championship match: Ric Flair (c) vs Jumbo Tsuruta - AJPW, 9/10
MASTERMIND:
Y finalmente, Naitch aparece en nuestras listas. Este es el primer tour por Japón de Flair como NWA World Heavyweight Champion, y el combate aquí presente es una defensa ante la cara de AJPW, Jumbo Tsuruta, en un (como no) 2 out of 3 Falls match.
Y es un gran combate, no cabe duda. Es de ritmo lento, especialmente la primera caída, pero casi nunca aburre porque meten suficientes momentos intensos como para mantener el interés. Jumbo luce muy bien ante el campeón mundial, está on fire y su arsenal pone en serios problemas a Flair. Nature Boy refleja de lujo lo exhausto que Tsuruta le deja poco a poco, y su preocupación es notable a través de sus geniales expresiones faciales. Flair vende a Jumbo como alguien perfectamente capaz de quitarle el título, lo cual no es ninguna novedad ante cualquier otro aspirante, pero siempre se agradece. Quizás mi caída favorita es la segunda, con Ric contra la espada y la pared y apañándoselas para remontar e igualar el marcador; pasa de preocupado a arrogante y confiado de una manera orgánica, siguiendo una estrategia infalible... pese a algunos momentos de susto en los que Jumbo le sorprende con la guardia baja. El clímax es bueno pero se queda corto en cuanto a emoción de un championship match, y el ref bump no se aprovecha para nada.
Es uno de los mejores combates del año, pero mi gran objeción es... que son Ric Flair y Jumbo Tsuruta. Cuando se enfrentan dos wrestlers que perfectamente podrían estar entre los mejores de la historia, uno se espera un all-time classic que no se ve aquí. Repito que es un gran combate, pero ninguna de las cosas que lo hacen grande (la ofensiva de Jumbo, la expresión corporal y facial de Flair, el clímax) pasa a un siguiente nivel de excelencia que uno espera. También se habrían agradecido mejores transiciones, porque pasaba de dominar uno al otro sin mucha dificultad y eso me chirría. 'Decepcionante' no es aplicable aquí, pero 'cumplió con lo que prometía en el papel' tampoco. Aún así, vale mucho la pena, cumple como main event titular y sirve como una pequeña gran muestra del talento de ambos wrestlers. Puntuación: ★★★★ 1/4
SONNY:
El primer combate de Flair en la lista, ya tardaba. Esta vez nos toca verlo en su tour en Japón defendiendo su título ante nada más y nada menos que Jumbo Turuta, el Ace de AJPW por esas épocas. Y así lo demuestra, superando a Flair en cada pequeña cosa que hace obligando al Nature Boy buscar de cualquier ponerse a la par. Ambos son geniales en lo que hacen, Tsuruta siendo el face potente que representa una verdadera amenaza para Flair y Flair por su parte da cátedra de lo bueno que es planteando un combate, sabe cómo vender la ofensiva del rival y como trasmitir lo que sucede con sus movimientos y expresiones. Quizás el match carece de un poco de drama y de una construcción más sólida para el final, aun así me parece un verdadero contendiente a MOTYC de ese año y se hace totalmente disfrutable para quien lo vea por primera vez. Puntuación: ★★★★
- Nick Bockwinkel vs Sheik Adnan El Kaissey - AWA, 13/9
MASTERMIND:
Los face vs heel son parte de la esencia del pro wrestling; los face vs face suelen ser dream matches u ocasiones especiales que quedan para el recuerdo... Pero joder, qué bien sienta ver un heel vs heel en condiciones. Esta es una batalla entre dos villanos, muy distintos entre sí, y en un No DQ match: sólo podía haber caos.
Efectivamente, la cosa se pone al rojo desde el minuto 0, cuando Kaissey ataca a Bockwinkel y a su manager, Bobby Heenan (ay :( ), antes de sonar la campana. Ambos genios venden de maravilla para él, y es muy agradable ver a Bock en un rol con el público a su favor. Pero no nos confundamos, Bockwinkel no es un tío bueno de repente, y si Adnan le da fuego él va a responder con toda una hoguera: lo saca del ring y le destroza la cara contra todo lo que pilla. Pf, es que llevan menos de cinco minutos y ambos ya están demolidos, con Kaissey sangrando profundamente; esto es drama.
La faena es que un tal Baron Von Raschke es el árbitro especial, y el combate parece más diseñado para ponerlo over a él que otra cosa. Es frustrante cuando en un No DQ el referee apenas deje pelear a gusto a los wrestlers. Pero bueno, tanto Raschke ¡como Heenan! juegan un buen papel en el final de la pelea, que aunque tiene escrito 'Attitude Era' en mayúsculas, estuvo muy bien llevado a cabo.
Kaissey no está ni de lejos al nivel de Bock y su selling no es lo suficientemente bueno para alguien que tiene sangre por toda la cara y recibe una paliza, pero la performance de Nick sí es increíble, en un papel totalmente fuera de su zona de confort, y con un gran público y un inteligente final, todo ello en el tiempo justo y necesario. Muy buen combate, sí señor. Puntuación: ★★★★ 1/4
SONNY:
Otro más de Bock. No estaba muy seguro de que tan bueno era
Sheik Adnan, particularmente le tenía algo de recelo porque el nombre me
recordaba a The Iron Sheik (quien está lejos de ser de mis favoritos) pero grata fue mi sorpresa en este combate al descubrir que es bastante bueno. Acá
la cosa es diferente a todo lo que hemos visto antes ya que no es el típico face
vs heel si no que estamos ante un heel vs heel así que todo auguraba tormenta. Y así fue. Adnan buscando a toda costa someter a
Bockwinkel es estupendo, logra dar una
sensación de amenaza bastante buena; Nick recuperándose es genial, en especial
porque demuestra que él no es para nada un face y se comporta como el estupendo
heel que es. Hay algo que puede cansar un poco y es el excesivo protagonismo
que toma el árbitro, pero es comprensible porque era un especial referee y es
un papel que suelen tomar cuando cumplen este rol. Hubieron algunos detalles
que me impiden tener un poco más alto este combate, como el selling de Adnan o
las constantes intervenciones, pero aun así me parece un muy bonito combate
digno de ver en este año. Puntuación: ★★★★ 1/4
- Stan Hansen vs André the Giant - NJPW, 23/9 (parte 2)
MASTERMIND:
Pfff, qué decir de este combate. Lo reseñé hace poco en mi blog personal, por lo que tenía miedo de que verlo tan poco tiempo después me fuese a parecer algo peor... Pero oh dios, no.
La idea aquí es que Stan Hansen está en una situación impensable para él: es el pez pequeño, el underdog, el que tiene la desventaja en tamaño. Pero eso a él no le importa una mierda, a él le da igual quien sea su rival incluso si se trata del mayor gigante del wrestling: él sale a dar hostias y nada se lo va a impedir. La bravura de Hansen pilla por sorpresa a André, quien se ve obligado a luchar por mantenerle quieto e intentar anular su mayor peligro: el brazo izquierdo, el del Western Lariat. Como dije en la reseña del blog, que un monstruo destructor como André necesite una estrategia para someter a su oponente ya es algo que de por sí pone muy over a Hansen. Pero el texano sigue, y sigue, y sigue. Está recibiendo una paliza pero no se lo pone nada fácil a André, quien por otra parte está magnífico siendo inteligente y aprovechándose del carácter impulsivo de Hansen (va a aplicarle un headbutt y al ver que se aparta frena la caída, el armwork, frena un elbow drop en el aire para atrapar ese brazo, etc).
El público es vital en el terremoto que tenemos aquí, y es que una batalla entre dos titanes como estos sólo podía acabar en doble cuenta-fuera, pero obviamente los fans quieren más. André y Hansen también quieren más, y es que en el fondo les encanta pelear entre sí, porque son dos bestias pardas que alimentan las ganas de guerra del otro. Así que cuando finalmente se reinicia el combate, el público estalla; es un momento mágico. André se lo pasa genial vapuleando a Hansen, pero se encuentra con que no puede rematar la faena. Hansen es increíblemente badass y sigue volviendo a por más, y todo eso lleva a uno de los mejores momentos de la historia de este negocio: el Western Lariat de Hansen al jodido André the Giant. Todo lo que rodea a ese spot es oro: el público, el comentarista, la reacción del árbitro, el selling de un Hansen que puso todo en ese golpe, el Gigante cayendo a ringside y siendo totalmente humillado. Y es que al final, André ha sido puesto en evidencia como el destructor número uno de la industria. Lo que estaba siendo una batalla divertida pero sin demasiados problemas, se había convertido ahora en la mancha más negra de su carrera hasta la fecha. El cabreo de André es muy palpable, pero también el miedo a perder, por lo que el final no podía ser más acorde a la historia que han contado.
Sinceramente, he visto este match unas cinco veces y cada una de ellas me ha parecido mejor, tiene algo que hace que cada vez sus puntos fuertes me encanten más y los que veía como puntos débiles me lo parezcan menos (o directamente dejen de parecérmelos). Todo luce demoledor, está lleno de momentazos, y la historia es perfecta. André se marca la mejor performance de su vida, todo lo que hace es de matrícula de honor (su selling, sus expresiones, su brutal ofensiva, sus momentos de astucia), y el puto Stan Hansen tiene su confirmación como estrella aquí: alguien que no se va a achantar jamás ante ningún desafío, y que va a partirle la cara a su oponente sea quien sea y goce del estatus que goce. Un combate con un aura única, uno de los mejores brawls de todos los tiempos, y candidato a mejor combate de la historia de NJPW.
Agg, qué cojones. Puntuación: ★★★★★
SONNY:
He perdido la memoria de cuantas veces he visto este combate y perdido la memoria también de cuantas veces he quedado con una sonrisa de oreja a oreja al acabar de verlo.
Si alguien me dice que este es el mejor combate de la historia, no lo tomaría como una exageración ni mucho menos; todo lo contrario: lo secundaría. Andre es un wrestler muy infravalorado por la crítica, siempre se tiene el recuerdo de ser un gigante que protagonizó rivalidades con Hogan en los primeros Wrestlemania y nada mas pero se olvidan de que era un wrestler excelente. Un gigante que cumplía perfectamente con su labor y hacia interesante su trabajo cada vez que se subía al ring. Hansen, por su parte, es uno de los wrestlers mas badass de la historia: se hacía cargo de quien sea que se le ponga al frente. Ambos tienen personalidades muy marcadas y cuando chocan no se puede esperar más que como mínimo un resultado interesante..
Con todo lo dicho es fácil imaginarse cuál es la dinámica que ambos quieren plantear. Andre, viniendo a apalizar a Hansen, se encuentra con un tipo que le planta cara y lejos de temerle lo trata como una basura, como un tipo normal cosa que saca de quicio al gigante y se comienza a poner intenso. Aunque más que intenso comienza a desesperarse, y por eso busca como salirse con la suya. La puesta en escena de todo esto es magnífica, el arwwork de Andre en un síntoma de desesperación. Las expresiones faciales de ambos, el enorme esfuerzo que muestran ambos, lo bien que trasmiten la sensación de cansancio ambos y sobretodo el hermoso Lariat de Hansen que deja desorientado al gigante... Todo es sensacional. No sé qué más añadir y que no se haya dicho ya, pero si no les queda claro para mí se gana la calificación perfecta. Puntuación: ★★★★★
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1981 no era un año al que le tuviese tantas expectativas, pero casi todos los combates que ya había visto me han parecido mejores que antes, y ambos hemos descubierto un par de joyitas también. Además, y esto dudo mucho que vuelva a repetirse, tanto Sonny como yo estamos de acuerdo en darle la calificación máxima a un match de este año, por lo que se puede decir que vale muchísimo la pena.
La semana que viene toca 1982, otro año que tiene pinta de ser genial. Os esperamos entonces. Muchas gracias por el seguimiento al proyecto en su primera semana, estamos todo el staff flipando con las visitas. De veras que os lo agradezco :)
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