La constancia es algo que tomo muy en cuenta a la hora de valorar a un wrestler. Hay wrestlers que pueden parecer geniales, pero que solo demuestran serlo un par de ocasiones al año, ya sea por pereza o por falta de motivación. Y es que Nakamura (por poner un ejemplo aleatorio y elegido totalmente al azar) puede tener el mismo año un claro candidato a MOTY y el mayor listado de actuaciones mediocres en PPV.
Sin embargo, hay otros wrestlers que, sin tener actuaciones
memorables en PPVs grandes, van dejando siempre algunos destellos de calidad en
cada oportunidad que tienen para mostrarse en los programas semanales. Yo soy
muy fan de este tipo de luchadores, y disfruto muchísimo viéndolos, porque
puedes estar viendo un semanal random de NXT sin mucho interés hasta que
aparece Lorcan y te deja una actuación brillante en los escasos cinco minutos
de los que dispone. Y, a lo mejor, estás a punto de dormirte durante la segunda
hora de un Raw cuando de repente, Kalisto te ofrece un match corto pero
divertidísimo. O puede que te pase lo mismo con Harper en SmackDown!. Y ya ni
hablemos del absurdo y gran nivel que está ofreciendo Neville este año.
Todos estos ejemplos son perfectamente válidos, pero hay
alguien que, en mi opinión, representa mejor que nadie lo que es un buen TV
worker. Y es que, con permiso de Neville, Braun Strowman es el rey de mi televisión.
Por eso, a modo tanto de homenaje como de justificación, y aprovechando que luchará por el título en SummerSlam, quiero hacer un repaso
de parte de lo que ha ido mostrando Braun en TV en lo poco que lleva de
carrera en solitario.
Braun Strowman vs Sami Zayn (21/11/2016) - https://www.youtube.com/watch?v=tN-OXEUb15k
Este combate es un clásico underdog vs monster heel, pero
hecho a la perfección para el poco tiempo que dura. Sami Zayn es un underdog
genial y vende muy bien (aunque sobreactuando un poco, como de costumbre) el
dolor y los golpes infligidos por Strowman.
Lo que Braun proporciona por su parte en este combate es una
dureza única en él en la WWE. Es esta dureza junto a su discreto y efectivo
moveset lo que hace que el público se vuelque aún más con Sami. La rudeza con
la que le quita la camiseta a Sami, la contundencia de cada golpe, lo bien que
vende como monster heel el mini-comeback de Zayn… todo esto hace inevitable que
empatices con el underdog y quieras que gane. Y Braun lo hace genial en tan
solo seis minutos.
Aquí podemos ver a Strowman sacándole algo decente a Seth
Rollins. Si esto no os convence de que Braun es de los mejores workers de WWE,
nada lo hará.
Dejando las coñas y el hateo gratuito a un lado, lo cierto
es que esto es de lo mejor que le recuerdo a Seth Rollins en su etapa como face,
y no es solo por la actuación de Strowman; Rollins plantea el combate de un
modo muy inteligente. Yo creo que esto se debe a cómo te condiciona el
personaje de Braun a la hora de llevar un match: en un combate normal, Rollins
utilizaría su moveset de siempre del modo de siempre, pero ante un monster heel
como Braun eso no basta. Por eso mismo Rollins se ve obligado a utilizar su
moveset de un modo coherente y preciso, algo que se echa en falta en el resto
de sus combates.
Por último, me gustaría destacar este gif porque DIOS
BENDITO BRAUN TE QUIERO CASÉMONOS
Braun Strowman vs Kevin Owens (30/1/2017) - https://www.youtube.com/watch?v=mVbFnCm7kUo
Recuerdo que al ver este combate por primera vez pensé que era el mejor del reinado de Owens como campeón universal. A día de hoy, y a falta de revisar su run con el campeonato, sigo pensándolo.
En este match, al igual que sucedía en el Rollins vs Strowman, podemos ver una versión mucho más centrada de un wrestler que en ese momento no estaba a su mejor nivel, con la diferencia de que la actuación de Owens es bastante mejor que la de Seth.
Los primeros dos minutos y medio del combate se basan en Braun pasando por encima del campeón de un modo muy contundente, tal y como nos tiene acostumbrados. A lo largo del match Strowman solo utiliza dos moves y su finisher. Esto no es casual, es un modo de mandar un mensaje: Braun no necesita más que eso para doblegar al campeón universal. Para colmo, esos moves son tremendamente simples, y están basados por completo en su superioridad física.
Owens, por su parte, también desempeña su rol a la perfección, usando como contrapunto un arsenal mucho más variado y basado en su agilidad. Como resultado, tenemos uno de los combates que más he disfrutado este año con tan solo cinco minutos en Raw.
Braun Strowman vs Big Show (20/2/2017) - https://www.youtube.com/watch?v=YczaiYYmTIY
Dejando de lado lo maravilloso que me parece que dos wrestlers puedan hacer que el público se levante con un amago de superplex en pleno 2017, este macth nos deja contemplar un lado de Strowman que no se ve en el resto de combates mencionados en el artículo. Primero, porque este combate es el más largo de todos ellos, y el único con la sensación de big match, pero también porque en este combate Braun ya no es el tipo grande, sino que tiene frente a él al atleta más grande del mundo.
El modo de Strowman de afrontar esta situación es aprovechar su juventud y velocidad, pues no basta la fuerza bruta para doblegar a Big Show. Es precisamente esta manera de plantear el combate lo que lo hace tan especial: Braun demuestra una agilidad y unos recursos increíbles para alguien de su tamaño. Por si esto fuera poco, Big Show y él consiguen que cada intercambio entre ellos se sienta especial e importante. Los kick outs a finishers tienen sentido y consiguen crear una sensación de épica maravillosa sin necesitar para ello una cantidad excesiva de big moves ni 45 minutos de match.
Podría añadir muchos más ejemplos, como su segundo combate contra Big Show o los dos contra Roman, pero sería algo redundante, ya que creo que con los combates de este artículo sobra para darse cuenta de que Braun Strowman es un wrestler con una calidad tremenda, y que, afortunadamente, va a ser una pieza muy importante en el futuro cercano de la WWE.
Unleash (@Unleash_sc)
Dejando de lado lo maravilloso que me parece que dos wrestlers puedan hacer que el público se levante con un amago de superplex en pleno 2017, este macth nos deja contemplar un lado de Strowman que no se ve en el resto de combates mencionados en el artículo. Primero, porque este combate es el más largo de todos ellos, y el único con la sensación de big match, pero también porque en este combate Braun ya no es el tipo grande, sino que tiene frente a él al atleta más grande del mundo.
El modo de Strowman de afrontar esta situación es aprovechar su juventud y velocidad, pues no basta la fuerza bruta para doblegar a Big Show. Es precisamente esta manera de plantear el combate lo que lo hace tan especial: Braun demuestra una agilidad y unos recursos increíbles para alguien de su tamaño. Por si esto fuera poco, Big Show y él consiguen que cada intercambio entre ellos se sienta especial e importante. Los kick outs a finishers tienen sentido y consiguen crear una sensación de épica maravillosa sin necesitar para ello una cantidad excesiva de big moves ni 45 minutos de match.
Podría añadir muchos más ejemplos, como su segundo combate contra Big Show o los dos contra Roman, pero sería algo redundante, ya que creo que con los combates de este artículo sobra para darse cuenta de que Braun Strowman es un wrestler con una calidad tremenda, y que, afortunadamente, va a ser una pieza muy importante en el futuro cercano de la WWE.
Unleash (@Unleash_sc)