Esto no va de la urgente limpieza que necesita el IWGP Intercontinental Championship. Tampoco sobre como lo que sujeta mi pantalón está para el desguace. Podría incluso haber sido una sesuda reflexión sobre lo que significa el prestigio sobre un campeonato de pro wrestling, pero se va a quedar en algo más simple.
Me desperté el miércoles con ciertas cosas en la cabeza, a cada cual más irrelevante. Las típicas discusiones futbolerdas con tus amigos tras una noche de UCL, una práctica de la universidad que debí haber entregado pero que estimé menos útil que escribir estas líneas, la duda de si desayunar en casa o un buen café de máquina y el difuso recuerdo de algo raro sucedido en el Six Pack Challenge para ser el number one contender del campeonato mundial de SD! live. En efecto, cuando miré mi teléfono vi algo que no me pudo dar más igual pero que también sacó una sonrisa irónica, la primera del día. Jinder Mahal estaba en primera línea por el título más importante del pro wrestling mundial.
Lo avisamos con la división de marcas. El prestigio de los títulos se iba a desplomar. Tuvimos a Finn Balor debutando ganando uno de ellos y a Dolph Ziggler volviendo a luchar por uno tras mucho tiempo. En otras épocas ya vimos a mid cards luchando por ellos en PPV, pero de manera mucho más informal. Retos en TV, midcards prominentes y demás. Sin embargo, lo citado anteriormente no tiene comparación con lo que pasó ayer.
Por si alguno no lo recuerda, Jinder Mahal es posiblemente uno de los mayores jobbers de los últimos tiempos en la WWE. Un tipo que no ha levantado cabeza más que para tener ciertos minutos en TV y ser destrozado por mid y low cards. Un tipo que incluso salió de la empresa tras ser parte del más bajo escalafón de la cadena alimentaria (algo así como "Nivel 3MB") de la empresa de Vince. Volvió presumiblemente para ocupar huecos del low card como el que ocupaba Hawkins pero ayer esto colapsó. Jinder es el number one contender y luchará ante Orton en PPV por el campeonato de la WWE.
El movimiento es comprensible pero injustificable como aficionado. Jinder puede servir de filón de cara a captar público indio. O podría, si no tuviera el carisma de una piedra y fuese genérico hasta decir basta. Su rasgo más reconocible no es ese gigantismo que hace que un worker tan terrible como The Great Khali sea hasta recordado con cariño por todos esos ex aficionados al wrestling que duraron de 2007 a 2008 en España, sino un cuerpo esculpido por los dioses, una dieta basada en arroz y pollo y unas venas a punto de estallar debido al uso de, como dicen en uno de los foros más populares en lengua hispana, "ciclos sanos".
Mahal no ha demostrado absolutamente nada en ningún aspecto. Ni como entertainer ni como wrestler. Simplemente es un 0 a la izquierda que por algún motivo se ha colocado en primera línea.
Se supone que la labor del heel es generar abucheos, pero dudo que Mahal sea capaz de generar más que indiferencia y cheap heat racista. Todos sabemos sus limitaciones y su bajísima capacidad para generar expectativa. Puedes colocar a alguien que no pertenece a la escena main event por el título máximo y generar dudas e interés ¿Tendrán el valor de darle el título? ¿Este push cambiará la escena principal? En el caso de Jinder, únicamente genera pereza.
Tengo claro que no veré la lucha. La falta de respeto al título me hace no sentir interés alguno por el match. Es evidente que un título no deja de ser un medio para hacer televisión, pero es una parte central del producto. Esto se siente como una serie de TV que por alargar su trama o intentar dar un golpe de efecto, muestra nulo respeto por su propio guión y personajes, ocasionando la pérdida de interés del espectador.
En los últimos meses he podido observar, al menos en mis círculos, una bajada notoria de interés sobre el producto televisivo del gigante americano. Si, ahora hay dos opciones y por momentos SD! fue genial, pero eso se acabó. Ahora hay dos productos y ninguno de ellos se sostiene por si mismo. No merecen mi tiempo ni en diferido ni mucho menos en directo. Esto solo ha sido otro clavo más en el ataúd de un producto, el de la marca azul, que se está diluyendo debido a experimentos con gaseosa.
Lo único que tengo claro es que ver Payback en directo no es la mejor opción cuando los Playoffs de la NBA están en juego y en algún canal random de televisión tengan reportajes sobre la repoblación de arces en Canadá. Al menos Fiti Thompson se toma en serio sus árboles.
Kingbilbin.
